El dolor físico puede tener muchas causas. Comprender el tipo y la causa de su dolor lo ayudará a identificar el tratamiento para el dolor más adecuado.

Los tipos de dolor que se pueden tratar con nuestros productos se pueden dividir en tres grandes categorías:

  1. Dolor articular causado por osteoartritis u osteoartritis
  2. Dolor muscular
  3. Dolor de tejidos blandos

El dolor puede localizarse en un punto específico del cuerpo. Cada uno de ellos puede requerir un cuidado ligeramente diferente. Estos son algunos de los lugares más comunes donde se siente el dolor:

  • Dolor de espalda – El dolor de espalda es la causa más común de dolor físico. Al afectar algunos músculos importantes para la flexibilidad del cuerpo, el dolor de espalda puede tener un gran impacto en la forma en que se mueve a lo largo del día.
  • Dolor cervical: desde la contractura hasta el estiramiento, el dolor de cuello puede ser muy molesto y limitante. Desde una mala postura hasta una rotación abrupta de la cabeza, desde traumatismos hasta estrés, el dolor cervical puede tener múltiples causas o desencadenantes.
  • Dolor de muñeca – Usamos nuestras muñecas todo el día. Estas son estructuras muy complejas que pueden sufrir fácilmente algún daño o alteración y causar dolor.
  • Dolor de hombro: ya sea inflamación, trauma o una posición incorrecta durante el sueño, nuestros hombros pueden doler con bastante frecuencia. El dolor de hombro puede impedir los movimientos diarios.
  • Dolor de tobillo – Nuestros tobillos se mueven todos los días soportando el peso de todo el cuerpo. Es por eso que el dolor de tobillo puede ser un gran problema.
  • Dolor de cadera: la cadera es una de las articulaciones de soporte de peso más grandes del cuerpo, por lo que el dolor de cadera puede ser común e incapacitante.
  • Dolor en las piernas: el dolor en las piernas puede causar inmovilidad parcial o total que hace que sea doloroso realizar actividades diarias como pasear al perro, subir escaleras, correr para tomar el autobús o practicar deportes.
  • Dolor de rodilla – Nuestras rodillas son la base de nuestro movimiento. Es por eso que el dolor de rodilla puede detenernos.
  • Dolor muscular: una distensión muscular puede ser muy molesta y puede ser causada por diferentes situaciones, deportivas y no.
  • Dolor en las articulaciones: las articulaciones rígidas y doloridas son una causa común de dolor a cierta edad y pueden limitarnos cada vez más a menudo, impidiéndonos hacer algunas cosas que amamos.
  • Osteoartritis: la causa más común de dolor en las articulaciones es la osteoartritis, que puede afectar a diferentes articulaciones, más comúnmente las manos y las rodillas. La rigidez y el dolor en las articulaciones, tan comunes con la edad avanzada, pueden dificultar el movimiento.

Algunas afecciones dolorosas como la artrosis no se pueden curar, y por ello es necesario aprender a vivir con el dolor, encontrando soluciones para aliviarlo.

El dolor, especialmente el dolor crónico, puede tener un fuerte impacto emocional. Puede afectar su vida diaria, manteniéndolo alejado de sus actividades normales, incluso aquellas que disfrutaba. También puede afectar la calidad del sueño. Estar privado de sueño es un aspecto negativo para la salud y puede estar asociado con una reducción en el bienestar mental.

Hay muchas actividades que puede poner en práctica a diario, que pueden ayudarlo en el camino del manejo del dolor y que eventualmente pueden integrar la terapia con medicamentos.
Algunas de las técnicas de manejo del dolor más comunes son:

  • Estiramiento
  • Masajes terapéuticos
  • Ejercicios ligeros
  • Meditación
  • Terapia de frío y calor
  • Biofeedback